martes, 17 de mayo de 2011

Roderas

En el mes de Abril y en estos días de Mayo ha llovido, ha hecho calor y el campo está exuberante. Por la parte derecha del canal, margen de las tojas, el camino se ha llenado de hierba, de flores, de cardos, de maleza, también el centro del camino, así que mi socio sigue las roderas derecha o izquierda, mientras a mí me gusta aproximarme al canal o recorrer las tierras aledañas al mismo.


En los caminos de la política también hay roderas transitadas, derecha e izquierda y algunos otros senderillos marginales y como la mayoría pasa por ellos, estos senderos, cada vez más trillados, parecen el cauce adecuado para la actividad política.
A estas roderas hasta les dan el nombre de ideologías: capitalismo o socialismo, conservadurismo o progresismo etc. Casi siempre reflejan posiciones enfrentadas, básicamente duales, maniqueas y si la mía es la buena a la otra que le den...
Algunos pueden sentirse en estos momentos electorales incómodos en su rodera y saltan la mediana, otros prefieren quedarse en casa, pero los más, ya con paso alegre y marcial, o con un andar triste y cansino acudirán a las urnas por su rodera.
Me habla mi socio, y creo que está hecho un lío. En primer lugar le aterran los ismos, que dice que consagran posiciones maniqueas, ya se hable de cristianismo o budismo, de realismo o cubismo y por supuesto de conservadurismo o progresismo.
Sigue diciendo que la rodera de la derecha le defrauda porque no es suficientemente conservadora. Con todos sus defectos hemos recibido una herencia de nuestros antepasados que tenemos que disfrutar y legar a las nuevas generaciones: El valor del individuo, de la persona, de su iniciativa, el valor de la honradez, el gusto por la belleza y la armonía, por la libertad, el premio al esfuerzo, la dignidad en la adversidad y la pobreza, el señorío y la buena educación y, para el creyente, el sentido de la trascendencia y de la hermandad de los hijos de Dios. En una palabra los valores de la cultura clásica y cristiana eliminando los contravalores que sin duda ha tenido y tiene.
Tampoco la actual rodera de la izquierda le satisface porque dice que no es suficientemente social. El individuo se convierte en persona cuando está integrado de estómago, corazón y mente con los demás individuos formando sociedad. Juntos hay que vivir, avanzar, evolucionar, inventar, transformar y tranformarse. Y una sociedad con castas y clases, con estómagos hambrientos y repletos, con sujetos despreciados y mimados, con miembros de la misma sin oportunidades educativas y otros elitistas, con enfermos y necesitados sin atención y otros rebosantes de medios, es inadmisible. Sin duda para conseguir una sociedad justa es necesario luchar contra esto... pero mucho màs necesario es luchar por..., ya que la eterna contra, posición maniquea, puede arrasar conquistas positivas.

¿Qué hará mi socio? Me tiene deconcertado, está deconcertado. Hemos salido de la sirga del canal y nos hemos metido en un trigal ya espigado. La planta es tan alta que me cubre y he tenido que acercarme a él para seguir su rumbo. Campo de trigo, vida, producto de las tradiciones agrarias y de las tecnologías que avanzan y no las roderas, tan holladas, tan muertas.

2 comentarios:

  1. Chindas, en la misma situación de desconcierto que tu socio nos encontramos muchos. Y la campaña electoral que estamos padeciendo no nos ayuda lo más mínimo. Terminaremos por el campo de trigo, y eso no debe ser nada bueno.

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  2. Lo mismo les pasa a las personas que se han manifestado este domingo en muchas ciudades, se han metido por el trigo y han abandonado las roderas. Mal asunto

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