viernes, 30 de julio de 2010

Tribus

Estábamos regando en la chopera cuando han aparecido en el camino tres perros con amo. Un momento de indecisión, de olernos y mirarnos, y hemos emprendido cortas y rápidas carreras jugando a atraparnos. Me he sentido miembro de un grupo, soy un animal social. Da satisfacción la compañía... Muy poco ha durado la experiencia, su amo les ha llamado y han seguido camino del pueblo, les sigo hasta que mi socio me reclama con un silbido, y a la sombra de los chopos enhebramos la charla.
Y constatamos que hombres y canes sentimos poderosas fuerzas que nos impulsan a la pertenencia al grupo, es algo genético que ha facilitado la caza o ha permitido a las personas pervivir, desarrollarse y dominar el mundo.
En este mes hemos asistido a dos acontecimientos que muestran elocuentemente la tendencia a la tribu. Miles de catalanes se apiñaban en Barcelona en protesta por la sentencia del tribunal constitucional sobre el Estatuto. Sin duda alguna esta multitud se sentía identificada con Cataluña, su lengua, su forma de ser y de sentir y el “somos una nación” era la expresión de este sentimiento, en principio magnífico. Es un grito de cohesión y ayuda al grupo en la consecución de sus objetivos...
Al día siguiente millones de españoles se desgañitaban coreando campeones, ¡España campeones! La euforia aún nos dura. ¡Qué alegría más intensa! Un grupo de deportistas, con los que nos hemos identificado, han triunfado ante la contemplación universal, parece que hasta setecientos millones pudieron ver el partido final. La gran tribu lo festejaba por todo lo alto. Maravilloso, el grupo se reafirma como tal y podía recuperar su jornada normal con más alegría, confianza en sí mismo y esperanza en el futuro. Porque somos animales tribales y el instinto de pertenencia como el de reproducción, lo llevamos en la sangre. Sin el grupo somos animales indefensos, condenados a la desaparición
Pero en este sentido de grupo hemos ido progresando, domando el instinto natural. Nos hemos vuelto racionales ya que el instinto es ambivalente, da fuerza al grupo y lo enfrenta a los otros grupos y si esto no es ordenado por la razón todos podemos perder.
Una corriente de alegre energía ha recorrido nuestra patria, ¿revertirá contra el extranjero o el emigrante o simplemente contra el sentimiento de pertenencia a las comunidades autónomas u obstaculizará nuestro sentir europeo? No sería ni positivo ni racional
El sentimiento de pertenencia a Cataluña y la promoción de su lengua y valores puede por parte de algunos ir acompañado de la búsqueda de la separación de la actual comunidad española, creyendo que la cohesión catalana sólo es posible en el enfrentamiento con la pertenencia común. También puede acontecer que esta cohesión del principado se considere por algunos como una afrenta a la pertenencia a la comunidad hispana ¿Es positivo y racional?
A mi socio y a mí nos encanta una España gozosa de sus logros y con impulso para superar sus problemas, pero no podemos concebir una España sin pluralidad en que todos aporten al conjunto el sentido de su pertenencia a su comunidad autónoma. No podemos concebirla sin catalanes que se expresen en catalán, sientan en catalán y se manifiesten, si así lo desean, como una nación, es decir un grupo bien identificado y dueño de sí mismo, que, al mismo tiempo, forma parte de la soberanía española, como los vascos, gallegos, andaluces, castellanos y todos los demás.
Una España que, en lugar de sumar valores, se construyese sobre la anulación de sus componentes, no sería la España a la que aspiramos; pero tampoco nos gusta una España diluida en sus partes, sin el nervio y la fuerza que da la unidad y esperamos seguir construyendo una Europa, no sólo de intereses, sino de tradiciones, valores y estructuras comunes, que permitan sentirnos miembros de una tribu mayor que continuando nuestro instinto de grupo nos permita una vida más plena, feliz y próspera.
Así que ¡Visca Espanya! y ¡Viva Cataluña!

jueves, 22 de julio de 2010

Transcendencia

Estamos en pleno mes de Julio. El calor es abrumador. Me paso el día tumbado a la sombra. Al atardecer nos damos cortos paseos buscando la protección de los árboles, aunque a las nueve estemos de vuelta en casa para no coincidir con el asueto de Charli, el gran perro de malas pulgas.
En este mes se han sucedido los acontecimientos, ha comenzado la cosecha, me han vacunado y mi socio setentón ha cumplido años. Los largos ratos de reposo nos han dado tiempo para meditar y nos hemos puesto transcendentales.
Muchas personas niegan la transcendencia, algo que está más allá de lo que percibimos y conocemos pues todos nuestros conocimientos parten de las percepciones de los sentidos y no podemos ir más allá de estos datos por más que la ciencia prolongue este campo de lo sensible. No hay otras realidades más allá y si las hay nos son desconocidas.
Lo que pasa es que este campo de lo sensible se realiza en diferentes planos y unos transcienden o van más allá de los anteriores.
Existe el plano de la realidad inanimada y es muy activo con movimientos mecánicos y reaciones químicas. Le transciende el plano de las plantas, sujeto a reacciones físico-químicas y sin ellas no se entiende, pero la vida da unidad a la planta y autónomamente se alimenta, se desarrolla y se reproduce. Estamos en el plano de la biología.
Y está la realidad del plano en que me muevo, el de los animales. También mi actividad está sujeta al plano de la física y de la química y al impulso vital, pero un perro no es una planta; me muevo, conozco y tengo sentimientos, estoy alegre o apesadumbrado, confiado o temeroso, siento cariño por mis socios y repulsión por los gatos.
Y veo a mis socios en otro plano superior; estos piensan, deducen, crean mundos imaginarios y pueden querer y amar más allá de la atracción de los sentidos.
Que en la base de todo esté lo físico y lo químico lo que acontece en los planos superiores necesita otras explicaciones. Tal vez podamos un día reproducir el salto de un plano a otro y conocer qué los diferencia.
¿Todo se acaba aquí? Aunque están los que niegan la racionalidad del más allá y su posición es entendible, muchos otros a lo largo de los siglos ven posible la existencia de lo desconocido y consideran muy racional esta posibilidad que estaría acorde con la tendencia humana a buscar una explicación que vaya más allá de un comienzo del mundo sensible y explique la intencionalidad que tiene, es decir, hacia la vida y hacia su evolución a planos superiores ¿Es esto una tendencia engañosa pues nunca podremos experimentarlo, o es una tendencia inteligente que proyecta a un más allá lo que acontece en el mundo natural?
Mi socio acepta el más allá y piensa que esta realidad es natural que actúe sobre el mundo que conocemos y yo lo entiendo pues, aunque de él no veo más que actuaciones iguales a las mías, que camina, siente y goza de unas cosas y evita como yo otras, intuyo que tiene una vida diferente a la mía y que ello influye en su comportamiento conmigo.
Pero él me dice que es algo diferente, que él y yo compartimos muchas cosas y que son constatables. Sin embargo el mundo del más allá no es detectable por nuestro conocimiento basado en la realidad física
¿O sí? Esto es un mundo aparte, el mundo del testimonio religioso.

sábado, 17 de julio de 2010

Activemos la esperanza

En la carretera de Frómista, a la izquierda, hemos estado viendo el campo de guisantes, por si estaban listos para cosechar. Están secos, pero la avena loca y la abundante broza está aún verde y el montón de grano fermentaría por la humedad. Habrá que esperar, arriesgando que la jeruga del guisante se abra y se pierda parte del grano. Ya el año pasado fue imposible la cosecha de esta leguminosa y hubo que enterrar la planta. ¿Cabe la postración y el desaliento? Este año el trigo cultivado sobre los guisantes enterrados se anuncia espléndido.
Huyendo del calor, a la sombra de la casa, meditamos sobre el pesimismo que se manifiesta tremendista entre nosotros.
Es cierto que hay cuatro millones de parados, que hay dificultades de financiación y que familias y empresas están faltos de recursos, que nos hemos endeudado y que esto nos obliga a contener los ingresos de pensiones y salarios y a aumentar el gasto del IVA.
Pero también hay datos positivos...Hoy hay más gente ocupada que hace una década. Los salarios y pensiones también son superiores. La renta media por habitante es superior a la italiana y se aproxima a la francesa, algo que se veía como muy arduo y lejano hace un par de décadas
No todo ha sido construcción, en otros muchos campos se han hecho muchas cosas como en el campo de la energía, servicios, infraestructuras, bancos, ni todo lo que se ha hecho en construcción ha sido negativo. Disponemos de mejores viviendas, universidades, hospitales, fábricas, redes viarias y muchas empresas se han reciclado y compiten internacionalmente por los grandes proyectos constructivos como la ampliación del canal de Panamá
Cierto que hubo imprevisión, exceso de alegría y especulación, pero más negativo será caer en el otro extremo del péndulo, en el agujero negro del pesimismo paralizante.
Hemos sufrido un duro correctivo. ¿Nos sentaremos en un rincón a llorar, esperando que papá estado lo resuelva todo? Dejaría de ser un correctivo y difícilmente saldríamos de la postración.
Es el momento de actuar, de la iniciativa, del tesón, de que aflore la inteligencia y la propia estimación, evitando caer en los mismos errores, que ya llegarán otros, siendo prudentes, pero arriesgados. Es el momento para que la prensa pregone las realizaciones que se consiguen y no sólo los problemas.
Está próximo el mediodía, hace calor. El campo está madurando sus frutos, no se quedan inactivos por el bochorno y yo me siento un perro inteligente y voluntarioso.

jueves, 8 de julio de 2010

Nos queda Portugal

Está avanzada la tarde y aunque hace calor, éste no es asfixiante, pues el tiempo está nublado. Espero a mi socio para salir al campo y dedicarnos a nuestras divagaciones sobre el discurrir de los acontecimientos. Hemos avanzado por la parva del canal y, ¡oh maravilla!, por primera vez mariposas. Las persigo e imprevisibles, me esquivan. En uno de los intentos por alcanzar a una de las más pequeñas por poco caigo al agua.
He estado mariposeando como en un hermoso juego con tan bellas criaturas. Pero puede acontecer que hermosas aspiraciones se conviertan en pasiones, tal vez, peligrosas, tengamos problemas y caigamos al agua,
Justo cuando estábamos atareados en reordenar nuestra economía con tanto paro y estrecheces de muchos, se desata con ímpetu el tema de la organización política del país con el guirigay sobre la sentencia del tribunal constitucional sobre el Estatuto de Cataluña.
¿Tan mal nos sentimos los ciudadanos con lo que somos, o es que algunos políticos se dedican a crear o a agigantar los problemas y aparecer como los salvadores necesarios?
Siglos llevamos como una comunidad política, con logros y fracasos y no el menor nuestra guerra civil y la falta de libertades durante larguísimos años.
Este es un país plural y hermoso, formado por gentes distintas, enraizados en sus tierra y tradiciones, y por fin nos pusimos de acuerdo en organizar nuestra convivencia buscando el bienestar común y la pluralidad con sus lenguas, sus tradiciones, y llevamos ya más de tres décadas de democracia con sus muchas virtudes y sus defectos que también le dan un cierto saborcillo.
La nación española, es decir, los españoles que tienen derecho a participar, se ha dado un marco legal que es la constitución. Porque esto es legalmente la nación, el sujeto de la soberanía, es decir el conjunto de los ciudadanos que participan o pueden participar por sí mismos o por sus representantes en su autogobierno.
Otro sentido de nación que cultivan los nacionalismos, como una realidad en sí misma basada en ciertas características, puede ser muy respetable pero no es el sentido tan austero, sin ideologías ni sentimientos de los textos constitucionales democráticos. Así que los nacionalistas riojanos o extremeños, si por casualidad existen, que no se sienten españoles son miembros de la nación española con todos sus derechos. Cuando nos constituimos en régimen democrático, una gran esperanza e ilusión se generó en el país y la constitución fue votada mayoritariamente en los cuatro puntos cardinales, creyendo que habíamos llegado al equilibrio entre el bienestar general y las aspiraciones de las comunidades autónomas.
Por supuesto que estas comunidades pueden perfeccionar sus estatutos dentro del marco constitucional, pero si quieren cambiar este marco general, tendrán que contar con la voluntad soberana del conjunto de los ciudadanos
Si se está creando un marco europeo y queremos estar en Europa, deberemos aceptar ese marco que soberanamente estamos creando, aunque a veces despotriquemos de las “imposiciones de Bruselas” pues es imposible desarrollar una Europa a la carta. Extraña, pues, la reacción ante una sentencia del tribunal cuya misión es determinar si ciertas leyes respetan el marco constitucional o lo violentan... Pero no se puede esperar otra cosa de los nacionalismos que basan su existencia en la bondad de lo suyo y la rémora que supone la pertenencia a una unidad más amplia.
Todo nacionalismo tiende por naturaleza a la independencia y es legítimo, aceptando una soberanía más amplia por necesidades circunstanciales. Y tienen derecho a pedir que se modifique el marco o a marcharse del mismo si es viable.
¿Se podría crear, entonces, una mayoría manifiesta independista? Sí. Imaginemos este juego deslumbrante: por una parte se dice que aspiramos a una Europa más activa y con más competencias, por otra se piden más poderes para la unidad autonómica. El estado actual queda constreñido y sobra Que estupendo que el presiden te de Murcia tenga el mismo tratamiento que la canciller alemana.
Sigamos imaginando: con una Cataluña independiente España dejaría de ser España además ni Andalucía ni Galicia, ni Aragón ni nadie querría ser menos. Diecinueve nuevos estados que deben negociar el reparto del ejército y sus compromisos internacionales, la policía, los funcionarios, las embajadas, los museos, el patrimonio, las empresas públicas y la deuda del estado. Las empresas privadas deberían crear diecinueve nuevas delegaciones para responder a los regímenes fiscales.
Y habría que negociar con Europa los derechos de voto, los parlamentarios, las cantidades contributivas los fondos europeos, si es que Europa quisiera negociar, tanto por lo complicado de una Unión de cuarenta y tres estados como por el mal ejemplo para otras regiones europeas que querrían también la independencia.
¿Nos dejarían seguir en Europa o por tanto perseguir mariposas nos dejaría caer al agua?
Si esto pasase, no nos angustiemos. A Castilla y León aún nos queda Portugal, nos integramos a ellos y seguimos en Europa.
Está lloviznando y no hay mariposas. Desde el pilón del agua vemos que Charli, un enorme y hermoso perro, amable con las personas, matón con otros chuchos, tiene su media hora de asueto y recorre las calles. Esto sí que es un peligro y no merece la pena enfrentarse a él. Bajo la llovizna volvemos por la chopera hacia el canal, haciendo tiempo.
Anochece, la llovizna cesa y amortiguados el calor y la luz, qué de carreras, de revolcones, de saltos. Cuando volvemos me resisto a entrar en el corral.
Evitados los peligros qué satisfactorio que ha sido el día.

viernes, 2 de julio de 2010

Los que todo lo pueden claman: ¡Libertad!

Estoy feliz en el corral de Chindas. Tengo temporalmente un compañero que, aunque nació aquí, en Requena, es un perro urbano de los que viven en un piso y salen a pasear al parque. Responde por Nano y es pequeño, con casi un año tiene mi alzada y menos peso que yo, que acabo de cumplir tres meses. Nos tienen que poner la comida en recipientes separados, por las peleas, pero es un compañero de juegos infatigable.
Ya he aprendido en mi escuela que todos los perros descendemos de los lobos y que formamos sociedad con los humanos para la caza. Uníamos nuestras habilidades y el resultado de nuestros esfuerzos era muy superior a la suma de los esfuerzos por separado. Los tiempos lo modifican todo y nuestra sociedad cumple otros cometidos, como la caza, la policía, la vigilancia, la compañía. En mi caso les doy y me dan fiel y feliz compañía y la suma de nuestras reflexiones es el blog Chindasvinto, que esperamos sea muy superior a lo que pudieran ser los comentarios de cada uno.
Por cierto que la raza humana tiene muy enraizada esta alianza con los lobos, nuestros antepasados, y buena parte de sus individuos siguen apellidándose hijo de lobo, es decir, López
Hoy en día la caza no es más que una diversión para unos pocos y se consiguen los bienes necesarios, y aún los superfluos, con una forma muy complicada de organización, a la que han llamado economía.
La organización económica como, cualquier otra organización, es valorada por sus resultados y tendrá que corregirse y evolucionar de acuerdo con las circunstancias y los tiempos, pero algunos la han absolutizado y convertido algunos de sus principios en leyes inmutables como la libertad de mercado.
Se comenzó organizando para conseguir bienes y productos. Después se vio la necesidad de intercambiarlos. Para un intercambio más cómodo se recurrió a la moneda. El paso siguiente fue ahorrar en dinero, unir los ahorros y formar grandes compañías. Últimamente existen innumerables productos que no son sino papeles o anotaciones en registros informáticos titulares de bienes y derechos o de futuros bienes y derechos, y todo esto se negocia en la Bolsa y dirige el dinero hacia las necesidades de las familias, hacia las empresas o hacia las instituciones.
Tenemos, pues, un mercado de bienes y servicios de consumo, un mercado de bienes productivos y un mercado de dinero y de títulos, al que se llama mercado financiero, y si, en un tiempo, el nervio de la economía fueron los bienes o las empresas productoras, hoy a pesar de que esto pueda ser básico la economía se rige fundamentalmente por las finanzas.
Grandes cambios de la organización económica se han producido espontáneamente, en libertad, pero pronto se vio que la libertad tenía que estar regulada por normas que evitasen engaños, abusos y desastres económicos que se han producido periódicamente.
La economía financiera, que hoy predomina, ha conseguido grandes logros pero también deficiencias e injusticias y, como nos dicen, nos ha llevado a un callejón de ruina y fracaso en el que no hemos sucumbido porque los gobiernos han salvado al conjunto, empezando por los imbéciles pero poderosos agentes financieros protagonistas del fracaso. La salvación ha supuesto el sudor y el sacrificio de los ciudadanos.
Pero los poderosos agentes financieros siguen pidiendo libertad de mercado para ellos y sacrificios para el resto.
Los poderosos, cuando tienes la sartén por el mango, sólo miran por sus propios intereses que proclaman como el interés general. La solución no es la crítica, tienen la cara de cemento. Lo vemos en nuestro entorno, los banqueros que piden el sacrificio de las pensiones dan a uno de los dirigentes que se jubila pensiones multimillonarias. Las Cajas de Ahorros se unen para bajar costes cerrando oficinas duplicadas con despidos laborales, pero los puestos de los dirigentes, también duplicados, no se reducen, se suman. Ya decimos nosotros dadme una buena presa a devorar y llamazme lobo.
Más que críticas son necesarias normas que permitan el mercado libre, que no lo es si está dominado por los poderosos. Normas y sanciones, a grandes abusos grandes penas.
¿No son los gobiernos nuestros representantes y los jueces nuestra justicia?
Pues, a veces, da la impresión de ser el gobierno de los poderosos y la justicia aplicada sólo a los de poca monta.
Nano nos mira displicente mientras elucubramos, pero él sí sabe de normas y defiende su espacio y su comida.